Jorge, querido hermano de la vida.
Siempre y es muy curioso, terminamos encontrándonos en penínsulas y playas, a causa del romantisismo que practicamos por periodos de nuestras vidas.
Así que pienso que este es un gran fluido elemento que provoca nuestro reencuentro y así será siempre que sepamos amar.
Posdata: gracias por enseñarme a pelar el ajo, que ha generado tantas buenas salsas y momentos.
Osvaldo Domingo Mollo
Mi amigo, el mate
El matecito que me dejaste
Aún lo conservo a mi lado
Recuerdos del pasado
Y amistad que me brindaste
diez años te acompañó
En la cárcel de Libertad
Al enviarme a Australia
Me lo entregaste sin vacilar
Siempre estuvo a mi lado
Como tú en mi corazón
Como ese hermano del alma
Que respeto y admiro
Por tu entrega a una causa
Que por humanos no pudo prosperar
30 años han pasado
Y el mate sigue conmigo
El dia que yo me vaya
El continuará mi destino
Chichi Uria
Punta Arenas, Marzo 2013
PORQUE EL DOLOR DE LA TRAICIÓN SÓLO SE ADORMECE CON EL FRAGOR DE LA LUCHA Y SE DISIPA EN LA ESPERANZA DE LA VICTORIA.
DEBEMOS SUPERAR LA NECESIDAD DE CREER, QUE NOS HACE SUBLIMAR LA REALIDAD, CONVENCIENDONOS DE LO INEXPLICABLE CON TAL DE NO PERDER LA ESPERANZA . PERO LA REALIDAD, TARDE O TEMPRANO NOS DA DE BOFETADAS, DESPERTÁNDONOS DE LA ILUSIÓN. Y CUANDO LA CONCIENCIA DESPIERTA SÓLO QUEDA EL CAMINO DE LA LUCHA. Y HAY UN SOLO CAMINO O SE CAMBIA TODO O SEGUIMOS IGUAL. Y ESTE CAMBIO SOLO SE LOGRA CON UN PROCESO REVOLUCIONARIO.
DURANTE 200 AÑOS NOS HAN ADORMECIDO CON FALSAS PROMESAS. ROBANDONOS TODO HASTA LA ESPERANZA. DISFRAZÁNDOSE DE CORDEROS PARA ENTREGARNOS AL LOBO.
EN ESTE TIEMPO HAN TRANSFORMADO EN FRASES HUECAS, LA MAS RICA FUENTE DE IDENTIDAD ORIENTAL. TRANSFORMANDO AL MÁS GRANDE EN UN MERO INSTRUMENTO DE SUS NECESIDADES.
POR TODO ESTO Y MUCHO MÁS, ES QUE HOY DEBEMOS RECUPERAR ESA IDENTIDAD QUE EL PROTECTOR JUNTO A LOS SUYOS NOS LEGÓ, DESTRUYENDO EL MANTO DE OSCURIDAD QUE LOS CIPAYOS, MALOS AMERICANOS TEJIERON EN BENEFICIO DE SUS INTERESES SOBRE SU PENSAMIENTO Y ACCIÓN.
ES TIEMPO DE RETOMAR LA REVOLUCIÓN, AQUELLA REVOLUCIÓN ARTIGUISTA, QUE NOS LIBERARA DEL YUGO DE LA OLIGARQUÍA Y LA DOMINACIÓN EXTRANJERA. NI UN DIA MAS QUE ESTOS 200 AÑOS.
SI COMPARTÍS QUE ES TIEMPO DE RETOMAR EL CAMINO DE LA LIBERACIÓN NACIONAL, CON LA GUIA DEL PENSAMIENTO DE ARTIGAS, NO DUDES... ¡ÚNETE A LA LUCHA, QUE ESTE ES NUESTRO MOMENTO!.
MANUEL G. ESMORIS PIÑEYRO
Para mi estimado Mau Mau:
Me sumo a esto que será parte de una manifestación afectiva de estos compañeros virtuales, que aun sin casi conocernos en la vida real hemos logrado encontrarnos a pura brújula.
Nadie nos ha presentado del modo convencional, pero sí nos han presentado las afinidades y parece que ha dado resultado.
Aca estamos "viendonos" prácticamente todos los días y de esta continuidad se ha ido generando el suficiente aprecio y afecto como para andarnos preguntando alguna vez por alguna ausencia notoria.
Tengo tu libro "El Humor de la Cana y otros bolazos", la colectividad yorugua allegada a mi lo ha compartido y más de una vez nos hemos reido con tu modo de contar y obviamente derivándonos a lo no tan divertido.
Tu ironía, sarcasmo y acidez sumado a un muy acentuado sentido del humor, hacen tus textos irrepetibles, se podrá compartir o no tu visión todas las veces, lo que es seguro que los estamos esperando.
Sos un buen testigo en primera fila de parte de nuestra historia, conociste en vivo y directo a los "compañeritos" como te gusta llamarlos, puedo entender tu decepción y hoy que te quedan pocos cortes de pelo, podrías intentar comprenderlos a ellos que tambien estaran decepcionados de no haber logrado arrastrarte a su declive vertiginoso, ponete por un momento en su lugar che! los estas dejando tirados!
Pero bueno Mau Mau, que pases un lindo inicio de un nuevo año de vida, que sigamos compartiendo el espacio facebuqueano por muchos más, si es que no sale algun otro invento comunicacional.
Un abrazo enorme de esta amiga-compa virtual.
Mabel Abogadro
Uruguayos somos todos los que viven en el Cerro,en Punta Gorda,en Las Brujas (departamento de Canelones) en Nueva York o en París,en realidad yo pienso que los verdaderos Uruguayos son los que realmente quieren construir una nueva sociedad sin injusticias, sin mentiras, sin contaminación,que se terminen los privilegios de unos pocos y las desgracias de las mayorías, que se termine el egoísmo y la hipocresía y así impulsar un verdadero cambio profundo, no más de lo mismo ni siquiera queremos mejorar lo existente, es en ese camino que los verdaderos hijos de Don Jose Gervasio Artigas queremos transitar, pero los que viven en el Uruguay o en el extranjero aun siendo conscientes de que nuestro país sigue transitando por el camino de las injusticias,la impunidad,que en el Uruguay el que tiene dinero tiene el poder o aquellos uruguayos hipócritas que miran para otro lado a sabiendas de la triste realidad yo creo que esos no son verdaderos Uruguayos son en realidad los descendientes de aquellos enemigos de Artigas que propiciaron que nuestro prócer traicionado y con peligro de muerte se exiliara al Paraguay y viviera allí hasta sus últimos días.
Un abrazo a todos los orientales de buena voluntad con hambre y sed de justicia.
Marcelo AIDA
ciudad de Vienne (Francia)
"Nos pasamos la vida creando y perdiendo la memoria, pero gracias al trabajo tenaz del olvido, vemos como el pasado se va reduciendo y nos deja esas señales, xa q sepamos quienes fuimos y quienes somos. Actuar y vivir como se piensa, genera una conducta de coherencia digna de imitar, q nos hace de alguna manera en referentes personales, sin saberlo!!
Gracias JORGE ROSSI (MAU MAU) X mostrar ese camino!"
Horacio Cabos
El presagio de una goleada norteña había ganado a los propios dirigentes uruguayos: uno de ellos en el vestuario celeste antes de salir a la cancha para la final, en tono de confidencia le pidió a los jugadores que jugarán de "guante blanco" y que con sólo tener que jugar la final ya habían salvado su honor: "Muchachos, no se hagan muchos problemas si pierden, aunque eso sí, traten de no comerse seis goles, con cuatro estamos cumplidos".
Ese derrotismo despertó en Obdulio un sentimiento de rebeldía, así que el capitán reunió a sus hombres y con la puerta del vestuario bien cerrada, les dijo: " LOS DE AFUERA SON DE PALO. ESTAMOS CUMPLIDOS SOLO SI GANAMOS"
Hoy... Maracaná ha quedado muy lejos, el recuerdo de Obdulio y sus muchachos ha alimentado un mito que aún nos emociona pero que también ha servido desgraciadamente para estimular una identidad "nacional" a contrapelo de la verdadera historia de este pedazo de tierra oriental y ha servido porque no, para adormecer cada vez más la verdadera rebeldía que deberíamos tener, los orientales hoy tenemos por delante un partido por jugar, tal vez seguramente el más importante de todos.
"Los de afuera" hoy nos llevan el país de a pedazos, nos roban nuestra riqueza, nuestros recursos, nuestras tierras, el agua y hasta la dignidad que aún nos queda, y los "dirigentes" no sólo nos alientan a "echar para atrás" sino que son cómplices y socios de los ladrones mientras nos mienten y nos dibujan una realidad equivocada, cuando en la calle todos los días vemos las funestas consecuencias de un camino desafortunado.
Hace 62 años el gran "Negro jefe" a contramano de la historia que parecía ya estar escrita y poniéndose la pelota abajo del brazo nos enseñó que nada es imposible y que la historia se puede cambiar...
Aunque tal vez nos esté faltando un "capitán" pongamos la globa abajo del brazo y cambiemos la historia, la alternativa está, cerremos la puerta del vestuario para que no se cuelen los "dirigentes" y salgamos a la cancha a ganar el partido.
NO DEFRAUDEMOS A OBDULIO, NI AL JEFE DE LOS ORIENTALES
ELLOS DESDE LA HISTORIA NOS EMPUJAN.
Adolfo Pecoy
El denominado "progresismo", término ideológico de aplicación genérica, que agrupa doctrinas filosóficas, éticas y políticas complejas -y a veces contrarias entre sí- que promueven el Estado benefactor mediante un discurso socialdemócrata-liberal, el nacionalismo privatizador, el antiimperialismo capitalista psicobolche, e incluso una nueva clase de socialismo semántico-místico emparentado con el populismo demagógico en su expresión más rancia, le sigue dando pie a este viejo loco para meter esos bazukazos con los que nos divierte y emociona cotidianamente. A tu buena salud, Mau.
Federico Leicht
Te conozco apenas por los artículos, que he leído en las redes sociales, pero creo que eso ya es más que suficiente para estimar a alguien, al fin y al cabo somos lo que pensamos y en mayor o menor medida, hacemos.
Qué bueno que haya gente como vos, que canta la justa bien clarita, sin andar con rodeos ni palabras de adorno, así ya de paso unos cuantos nos ahorramos las visitas al diccionario (sin desprestigiar la riqueza del idioma, me parece que “inflar” una opinión/idea usando palabras “raras” no sirve para nada, y muchas veces intenta compensar la debilidad de un punto de vista).
Pero más que conocido, sos un amigo, porque no cualquiera se dedica a ayudarnos a pinchar la burbuja (algunas, bien armadas, hasta son a prueba de balas!) que vamos armando –con ayuda, cabe mencionar- para vivir cómodos entre tantas mentiras y verdades a media que nos dirigen (no suena muy exagerado, no?).
Así que, por eso, MUCHAS GRACIAS!
Guillermo Padilla
El bicho humano tal como lo conocemos, nos cuenta el Mau, lleva muy poco tiempo habitando el planeta y ya se ha convertido en el Homo economicus. Lejos de ser una más de las histriónicas ironías a las cuales recurre en su habitual discurso para aliviarnos de la cruda y despiadada realidad que nos es tan propia y por incluirnos no somos capaces de observar, es la capacidad de ampliar el lente hasta llevarlo a una lucidez entrañable. Tan profundo en lo filosófico como claro y popular en el lenguaje, estos trabajos serán no sólo para el presente sino como documentación y huella necesaria para los tiempos venideros.
Siendo las circunstancias del momento tan activas para agudizar la mente dialéctica que sacuda otras mentes adormecidas para recuperar lo que por naturaleza nos pertenece. Pero bien hemos aprendido, tarde y tristemente que es muy fácil que se nos convenza de que estamos necesitados, buscando y queriendo algo que es realmente un canto de sirenas y la tragicómica postal de un coro desafinado que las acompaña.
Por eso son tan importantes estos trabajos que mastican conciencias. Porque siempre lo supimos. El que no cambia todo, no cambia nada. Sin hombre nuevo, no hay revolución. Allí es donde se gesta.
Marcelo
"Como cagarse en la gente y seguir siendo gente" (dix MSMD)
Esta interrogante fue nuestro punto de partida.
Se podría decir que estaba dejando de ser una niña, (pero es solo una apreciación cronológica), cuando conocí a Jorge. Hoy soy abuela y las nieves del tiempo cubren más allá de mis sienes y Mau Mau sigue siendo parte entrañable de mi vida.
Fue en La Aguada, en su casa de paredes escritas con pensamientos y frases para reflexionar a lo largo de toda la vida. Me enseñó una vida de puertas abiertas, solidaria, cuestionadora, entregada. Hablando siempre de tu. Siempre sincero y sensible.
Cuando nos visitaba en Montevideo, nos llevaba el desayuno a la cama a mis hermanas y a mi.
Me quedó en el deber aprender a bucear con él.
Las cartas del Penal, las visitas, Maruja. Hay veces que el lápiz es muy rígido para dibujar tanta vida, tanto dolor, tanto afecto.
Marta Sofia
Querido Mau Mau:
Tu carta tiene el cariño de épocas de lucha, de compañeros-compañeros.
Como bien dices antes de los discursos en los cementerios ahora tan visitados por todos nosotros, es mucho mejor expresarlos en vida, dichos así con el alma y corazón abiertos.
El exilio del "asqueado" es tu forma de resistencia a lo que no quieres para tu país y su gente, no sientas culpa si es la manera de seguir siendo quien quieres ser. Abrazos, Carlitos
PD: Siempre me llegan tus correos, no siempre tengo tiempo para contestarlos, pero estás allí cercano
Respuesta del Mau:
Gracias compañera Irma, querida compañera imprescindible.
Ah! si volvieran a aparecer unas docenas de leonas como tú....
Leí la carta que le escribiste a Julio Baraibar y aparte de hacerme lagrimear con tu coraje, tu entereza, tu claridad y tu lógica me reverdeciste y me hiciste sentir desertor.
Lo que no lograron 70.000 milicos en 10 años ni los 500 días de calabozos lo consiguieron ésta murguita de pequebuses disfrazados en 3 años.
Más que bajar los brazos me asquié y rajé para el Brasil a esperar tranquilamente la muerte;pero claro siempre aparece un incordio como tú (no solamente para los capitalistas fascistas o "progresistas") sino para los compañeros a los que averguenzas con tu ejemplo de seguir por la misma senda de toda una vida.
El resultado de toda esa gesta que la vivimos de adentro,el agarrar distraida a la élite y ganar el gobierno no era para darse vuelta y traicionar aliándose con el enemigo, era para seguir para adelante, había un pueblo atrás. Eran condicciones más propicias que las que encontraron ese puñadito de locos barbudos cuando entraron en La Habana. Pero nosotros somos gente jodida, dilettantes, fantasiados de revolucioinarios.
Te aplaudo y te admiro, querida Irma, y envidio tu esperanza que perdí. Me dí cuenta que no me queda tiempo (ni siquiera sé si le queda tiempo a la humanidad) y me convertí en cómplice por omisión.
Renuncié a la revolución y me divorcié del Uruguay. Es claro que éste es un aplauso avergonzado. No pretendo justificar mi debilidad de estomago de no soportar el asco.
El abrazo fraterno de tu ex-compañero
P.D.: Como nunca me gustaron los discursos en los cementerios, y como creo que algunas cosas hay que decirlas para muchos, me tomé la libertad de reexpedir ésta carta para otros compas y algunos que no lo son.
ODA A LA DUDA
Loada sea la duda! Os aconsejo que saludéis
Serenamente y con respeto
A aquel que pesa vuestra palabra como una moneda falsa.
Quisiera que fueseis avisados y no dierais
Vuestra palabra demasiado confiadamente.
Leed la historia. Ved
A ejércitos invencibles en fuga enloquecida.
Por todas partes
Se derrumban fortalezas indestructibles,
Y de aquella Armada innumerable al zarpar
Podían contarse
Las naves que volvieron.
Así fue como un hombre ascendió un día a la cima inaccesible,
Y un barco logró llegar
Al confín del mar infinito.
¡Oh hermoso gesto de sacudir la cabeza
Ante la indiscutible verdad!
¡Oh valeroso médico que cura
Al enfermo ya desahuciado!
Pero la más hermosa de todas las dudas
Es cuando los débiles y desalentados levantan su cabeza
Y dejan de creer
En la fuerza de sus opresores.
¡Cuánto esfuerzo hasta alcanzar el principio!
¡Cuántas víctimas costó!
¡Qué difícil fue ver
Que aquello era así y no de otra forma!
Suspirando de alivio, un hombre lo escribió un día en el
Libro del saber.
Quizá siga escrito en él mucho tiempo y generación tras generación
De él se alimenten juzgándolo eterna verdad.
Quizá los sabios desprecien a quien no lo conozca.
Pero puede ocurrir que surja una sospecha, que nuevas experiencias
Hagan conmoverse al principio. Que la duda se despierte.
Y que, otro día, un hombre, gravemente,
Tache el principio del libro del saber.
Instruido
Por impacientes maestros, el pobre oye
Que es éste el mejor de los mundos, y que la gotera
Del techo de su cuarto fue prevista por Dios en persona.
Verdaderamente, le es difícil
Dudar de este mundo.
Bañado en sudor, se curva el hombre construyendo la casa
En que no ha de vivir.
Pero también suda a mares el hombre que construye su
Propia casa.
Son los irreflexivos los que nunca dudan.
Su digestión es espléndida, su juicio infalible.
No creen en los hechos, sólo creen en sí mismos. Si llega el caso,
Son los hechos los que tienen que creer en ellos. Tienen
Ilimitada paciencia consigo mismos. Los argumentos
Los escuchan con oídos de espía.
Frente a los irreflexivos, que nunca dudan,
Están los reflexivos, que nunca actúan.
No dudan para llegar a la decisión, sino
Para eludir la decisión. Las cabezas
Sólo las utilizan para sacudirlas. Con aire grave
Advierten contra el agua a los pasajeros de naves hundiéndose.
Bajo el hacha del asesino,
Se preguntan si acaso el asesino no es un hombre también.
Tras observar, refunfuñando,
Que el asunto no está del todo claro, se van a la cama.
Su actividad consiste en vacilar.
Su frase favorita es: «No está listo para sentencia.»
Por eso, si alabáis la duda,
No alabéis, naturalmente,
La duda que es desesperación.
¿De qué le sirve poder dudar