Pero el libro aún no terminó... la
última nota es de un pibe al que adoro, en la foto se le ve toda la facha.
Espero que más de uno haya llegado a abrir los ojos al terminar de leer el
libro, en cuanto a la realidad que le rodea. Vivimos en una mentira, gente.
Empiecen a abrir los ojos de una vez por todas!
"... no soy de aquí,
no soy de allá,
no tengo edad,
ni porvenir...".
Facundo Cabral
Es jodido ser apátrida. Sientes que
estás colgado del pincel. Es parecido a la sensación de estar en el exilio con
la ventaja que ya no tienes más nostalgia de la patria ni la añoras. Yo ahora
vivo en "mí" patria (todavía tengo 14 hás. a mi nombre en Lavalleja),
sigo siendo considerado "un ciudadano uruguayo", porque no se me
niega el derecho de aportarle los 2.000 dólares de media, que cada ciudadano le
dá al Estado ni los U$S 0.33 x día, que cada ciudadano pone para sustentar los
50.000 milicos que defienden nuestra "soberanía" -y de paso- los
intereses de la oligarquía, las multinacionales y el imperio o no?
En mi infancia y juventud me
enorgullecía de ser uruguayo, pero de a poco se me fué destiñiendo la
nacionalidad.
A los gurises no se les debería
mentir en la escuela, ni en la casa, ni en la iglesia. Te cagan a mentiras,
pero uno de a poco, se va avivando y en cada desilusión dolorosa se va dejando
un girón más del "amor a la patria" que nuestros milicos tienen pa'
tirar pa' arriba. A mí el poco amor a la patria que tenía me lo abollaron a
patadas en los cuarteles. Después descubrí que x el hecho de haber elejido ser
subversivo -con todo lo que eso supone- demostraba que no amaba mi patria:
asesino, secuestrador, ladrón de bancos, estar contra la explotación del hombre
x el hombre, contra el latifundio, contra los prestamistas usureros (fueran
ellos nacionales o internacionales), contra que los medios de producción PUEDAN
ser privados, contra los burócratas parásitos del Estado lo que lo torna caro,
corrupto e ineficiente.
A la policía le perdí el respeto
en función de sus propios méritos, de los que hicieron gala en las 32 veces que
me llevaron preso en mi vida.
("Si lo llevaron preso algo habrá
hecho...." comentará seguramente cualquiera de esas señoronas burguesas,
culonas y reaccionarias que integraban esa multitud silenciosa de 800.000
ciudadanos/as, que apoyaron el "proceso" y lo apoyan todavía - ver
las encuestas-).
A la justicia le perdí el respeto,
cuando entendí x qué le decían "justicia de clase".
A la aduana le perdí el respeto,
no sólo por mi experiencia de haber sido un piloto -contrabandista-, uno de los
oficios más dignos que conozco, (disculpen que excluya de la clasificación a
los pilotos militares que contrabandean en los Hércules estatales desde P.
Arenas), junto con el de agricultor o pescador -dentro de un país clasista, de
privilegios y lleno de corruptos, coimeros, escaladores y ambiciosos como éste,
claro; sino por haber tenido múltiples experiencias que no necesito
registrarlas en un libro. Estoy seguro que me salen a comprar los derechos para
que no se edite...
En una de las pocas medidas
administrativas con la que concuerdo plenamente, me retiraron del padrón
electoral; no puedo votar; así que ningún partido cobra los pesitos de mi voto.
La última vez que voté fué en el
1er. Plebiscito, dónde casi todo el mundo votó asustado y perdí; fuí uno del
1.100.000 uruguayos que son concientes de que si no ponen a los milicos en su
humilde lugar de empleados públicos privilegiados, (y más privilegiados x estar
enfierrados; x aquello de que "el poder nace del fusil"), el atropello
monstruoso y desconocido se va a volver a repetir; idéntico, xque lo enseña la
historia pasada y reciente.
Por ahora, camina muy bien la
política implantada por Mac Namara a partir de Viet -Nam de "combate a la
pobreza" que es puro verso, pero que sirve para engrupir a la gilada y
mantenerla esperanzada.
Lo importante es que el negocio no
pare, y si es posible que mejore.
Y las cifras demuestran que va
viento en popa.
Cumplí 72, no me queda tiempo, pero
me muero sabiendo exactamente lo que hay que hacer para lograr los cambios.
Conciencia popular y desarmar al sistema. Van a continuar tirando un tiempo con
fragmentos cada vez más breves.-
Lo que se pueden sacar con un
peine fino, los crédulos que compran los versos que les venden, es que van a
desaparecer los bichicomes, los que duermen en las calles, los malabaristas,
los hurgadores, los gurises que salen a meter el caño o van a mejorar las
cárceles, el INAU, el desempleo, la educación, la salud pública o la vivienda.
Está todo el pescado vendido. El pueblo va a seguir ignorante, manipulado y
engañado.
Nadie quiere cambiar nada; como
casi todo el mundo está acomodado o prendido de alguna tetita -o tetona-
estatal (verbigracia: SACEEM) podemos hacer de cuenta que vivimos en el mejor
de los mundos y que "el país" mejora cada día más.
¿Pero de quien es el país? Mío no
es, ni siquiera en el sentimiento.
P.D.: En el 2014 me pongo a
hinchar x la celeste, que eso no compromete a nada y nos dá el sentido de
nación, que la gran estancia medieval no lo dá.
MAU MAU
Don Jorge Rossi Rebufello
C.I
1350.985-5, Credencial EAA 22288.
Preso
N° 1542. Piloto A 2637. Piloto B 432
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